Toro Arte Michoacán| Hidalgo Toros.

San Manuel Xocongo,Hidalgo a 25 enero de 2016.- El sábado pasado se llevó a canbo un festejo taurino en el Lienzo Charro, mano a mano entre el matador michoacano Enrique Villareal y el defeño Fernando de la Cruz, quienes lidiarón y dieron muerte 4 novillos de la ganadería “La Cadencia” de Uriel Huerta.

Abrió el festejo Enrique Villareal con “Una vez más”,novillo,con 380 kilos de peso, al que recibió con dos faroles de rodillas pegado a tablas, que le resultaron muy aplaudidos por el respetable, continuando con una serie de gaoneras de muy buenas hechuras, después del quite de varas el Matador Fernando de la Cruz realizó un vistoso quite de gaoneras con lo que recibió el reconocimiento del público. Con la muleta Enrique realizó una serie de pases por la derecha rematados por alto, siguió con una serie de naturales muy bien realizados con profundidad, el novillo se refugió en tablas y después de varios pases por alto se tiró a matar despachando al burel con media estocada, lo que le valió que le otorgarán la primera oreja de la tarde.

Con el tercero de la tarde de nombre “Así vivo yo” de número 36, con 415 kilos, Villarreal inició su trasteo con una serie de verónicas a pies juntos y pegado a tablas, siguió  con un quite por mandiles que le valieron los aplausos y los oles del público, después del tercio de varas realizó un quite por chicuelinas muy ceñidas y de manos bajas que dejaron a los espectadores al filo de las gradas, ya una vez realizado su brindis a los presentes, inició con la muleta con unos doblones muy marcados por ambos lados y una serie de muletazos con la mano derecha con las dos rodillas a tierra, rematando con un forzado de pecho rodilla a tierra, continuó con una serie de naturales de buena manufactura, pero después de una serie de derechazos en el momento en que remato al novillo con un trincherazo, el burel le hecho mano y le dio una voltereta muy aparatosa pero sin consecuencias graves a lo que ya encastado el Matador se levanto y con una serie de manoletinas se dispuso a matar al novillo dejando una certera estocada hasta los gavilanes aunque  un poco delantera siendo cojido en el embroque afortunadamente de nuevo sin consecuencias, logrando así que le otorgarán dos orejas mas que le valieron salir en hombros por la puerta grande.

Por su parte Fernando de la Cruz, nos permitió saborear la solera de su toreo, con su primer novillo de nombre  “A tu recuerdo”, de numero 40, con 385 kilos, al que recibió con excelentes pases de tanteo y unas verónicas muy bien realizadas, después del tercio de varas se realizó una demostración de pundonor y competencia por parte de los actuantes al realizar por su parte Enrique Villarreal un quite de gaoneras y por parte de Fernando unas tafalleras muy bien estructuradas, ya con la muleta el novillo se vino un poco a menos por lo que a pesar de los grandes esfuerzos realizados por parte del Matador Fernando solo dejo pinturerías de su toreo en las tandas realizadas por ambos lados y una estocada certera en todo lo alto le valieron para ser premiado por el Juez de plaza con una oreja.

Con “Siempre vivo” de 450 Kilos y el cuarto de la tarde, Fernando hizo una gran demostración de su experiencia y valor al realizar cuatro verónicas de rodillas rematadas con una media que le fue muy coreada por los presentes, seguido de unos mandiles a medio ruedo y rematados con un manguerazo de villalta, después del tercio de varas brindo su faena al respetable público e inicio con una serie de estatuarios pegado a tablas que remató con un pase de pecho, para de forma continua dirigirse a medio ruedo y realizar un cambiado por la espalda de mucha dificultad y valor,de manera muy ligada y después de encontrarle la distancia perfecta al novillo realizó unos pases con la mano izquierda, con hondura y largueza que demostró de qué esta hecho,  en diversas ocasiones intento realizarle faena a “Siempre vivo” por el lado derecho pero este se quedaba a media embestida y a pesar de que l estoqueador se quedaba firme  aguantando los extraños del burel no hubo mucho que hacer por ese lado, concluyendo con una serie de trincherazos para cerrarlo en tablas y tirarse a matar, realizó la suerte con limpieza y media estocada que fue suficiente para que fuera premiado con una oreja, a pesar de la fuerte petición de la segunda oreja el juez de plaza se negó a otorgarla.