Apenas en la segunda corrida que suma en territorio mexicano, tras su primera incursión como matador de toros en Europa, André Lagravere “El Galo” se reveló como un torero con gran futuro al haber obtenido un triunfo de tres orejas ante serios ejemplares de la ganadería Begoña, en el marco de la celebración del 80 aniversario de la plaza Revolución, de Irapuato, Guanajuato.

El cartel lo encabezaron Joselito Adame, Octavio García “El Payo”, y Diego Silveti, quienes también entregaron lo mejor de tauromaquia para obtener el triunfo, no obstante, André, siendo el más joven del cartel se les fue por delante, al ejecutar serias faenas en las que toreó muy ajustado, con variedad y temple. Su entrega, le costó sufrir un par de volteretas con el cuarto toro.

Por añadidura remató ambos trasteos con un acero firme para obtener, un triunfo absoluto, a razón de dos orejas a su primero, y otra del octavo, luego que el juez no concedió la segunda, tras haberlo hecho rodar sin puntilla, por lo que la gente, le montó una bronca a esta autoridad. El menor de los toreros Lagravere salió a hombros de los aficionados, quienes quedaron imantados por su toreo. Firmó una brillante presentación en este emblemático coso de la geografía mexicana.

La reseña final fue: Toros de Begoña. Joselito Adame, palmas en su lote; Octavio García “El Payo”, silencio y oreja; Diego Silveti, oreja y saludos en el tercio; y André Lagravere “El Galo”, dos orejas y oreja.