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Por:Jesús Zarate  Foto:Gustvo Pelayo Fuente: suertematador.com

Guadalajara,Jalisco a 16 de agosto de 2015.-La combinación en el papel no podía ser mejor, con tres nombres que conformaban un cartel de altos vuelos. Ante ese panorama se esperaba que se tuviera un agarrón, pero en la realidad el resultado se quedó cortó al limitarse a la cosecha de una sola oreja a cargo de Diego Emilio, quien terminó por acreditarse como el triunfador en la primera novillada de la temporada de Guadalajara.

Debutó en la Nuevo Progreso la ganadería jalisciense de La Concepción, que de entrada mandó un encierro bine rematado, salvó el sexto que desentonó con la presencia del resto. Cumplieron en los caballos.

Diego Emilio abrió el festejo y tuvo la fortuna de encontrarse con un astado de gran calidad que le permitió acomodarse y torearlo con suavidad, el único pecado del burel fue su falta de fuerza. Tras una estocada caída cortó una oreja que hizo albergar esperanzas de que la tarde iría hacia arriba.

Sin embargo, el escenario fue completamente diferente. Antonio Mendoza se enfrentó a un astado con complicaciones ante el cual estuvo muy por encima. Una labor tesonera que al final no encontró recompensa.

El mismo camino siguió Gerardo Rivera quien lució en banderillas, pero en el último tercio no encontró la distancia exacta y la faena se vino a menos.

La segunda parte de la novillada, fue de más pena que gloria. Diego Emilio nunca pudo ponerse en el sitio en donde le repetía el astado, entre pase y pase tenía que volver a comenzar la serie.

Antonio Mendoza tuvo el mal fario de tener un novillo que carecía de recorrido, y ante el cual estuvo tratando de encontrar un camino, el cual nunca apareció.

Gerardo Rivera se la jugó ante el sexto de manifiesta debilidad y al que había que llevarlo con mucho temple. Fue prendido uy logró firmar muletazos de gran valía. Decidió regalar un séptimo de Santa Rosa de Lima, con mucho genio, y que por alguna razón inexplicable pidió el cambio de tercio sin que estuviera debidamente picado el burel. El peligro se sentía en el ambiente y para colmo estuvo a punto de írsele vivo. Una apuesta que salió contraproducente.

Ficha técnica: Plaza Nuevo Progreso. Tarde nublada y con amenaza de lluvia. La Concepción envío un encierro bien presentado, del que desentonó el sexto. Pelearon en los caballos. Por su calidad destacó el primero. El resto acusaron debilidad y falta de fuerza. Diego Emilio (gris y claro y plata): oreja y silencio. Antonio Mendoza (azul cielo y oro): silencio y pitos. Gerardo Rivera (palo de rosa y oro): silencio, palmas y pitos en el de regalo.